En 2006, el
peruano Santiago Roncagliolo se ganó merecidamente el honor de ser el ganador
más joven del Premio Alfagura con una novela rotunda que sintetiza lo mejor de
la literatura sociopolítica hispanoamericana sabiamente aderezado con elementos
de thriller, literatura policíaca y hasta terror. El “héroe” de Roncagliolo, el
fiscal Félix Chacaltana, recién vuelto a su provincia natal, Ayacucho, tras
traumáticas experiencias personales en Lima, en busca de un reposo espiritual
que no hallará es un personaje
fascinante por muchas razones. Sin necesidad de recurrir a sus rasgos de
“antihéroe” o a su anclamiento edípico en el dolor de la muerte de una madre
que domina su vida cotidiana, fascina en él su enfrentamiento con un sistema
cuya corrupción todos parecen dar por hecho menos él, viciado por oscuros
mecanismos de manipulación social y política y por una profunda misantropía que
es la excusa perfecta para justificar su falta de compromiso. Tanto en sus
rasgos de pacato cumplidor del deber como en los momentos en que se muestra más
valiente y resolutivo, su inocencia parece intacta y su antagonismo parece del
todo espontáneo, sin sombra de premeditación. La novela quizá toca techo en el
episodio en que Chacaltana, para que no “estorbe”, es mandado como inspector de
elecciones (¿democráticas?) a Yawarmayo, pobrísima y sórdida provincia donde la
opresión del poder estatal se suma a los residuos del terrorismo de Sendero
Luminoso y sus múltiples tácticas intimidatorios (memorable la escena de los
perros decapitados), escenario donde incluso Félix habrá de traicionar su ética
privada y mostrarse cobarde ante los periodistas que podría haber utilizado
para denunciar la auténtica situación del lugar. En su exposición de las
interioridades desgarradas de la Latinoamérica más dura, Rocangliolo raya a la
altura de los colombianos Fernando Vallejo o Evelio Rosero. Junto a estos
elementos de tono social (muy notable también la visión lúcida y crítica sobre
Hispanoamérica que se deriva de las conversaciones del protagonista con el
preso por terrorismo Durango), la novela se redondea con un thriller sangriento
perfectamente tramado hasta en sus mínimas piezas: Chacaltana investiga la
aparición de un cadáver quemado y horriblemente mutilado en un granero, al que
seguirán toda una serie de asesinatos similares de las personas cercanas a su
entorno.
1 comentarios:
cuales son los personajes principales de esta novela :(
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